top of page

Diplomacia Digital y Poder en la era de la interdependencia tecnológica

Nota: Las opiniones expresadas en este texto son de exclusiva responsabilidad del autor y no reflejan necesariamente la posición de este sitio web.


En septiembre de 2025, la Asamblea General sobre Defensa, Espacio y Ciberseguridad de la Agencia Espacial Europea reunió a delegados frente a paneles electrónicos y pantallas digitales. El encuentro marcó la centralidad de lo digital como tema de seguridad y gobernanza internacional. La diplomacia, antes restringida a negociaciones presenciales y documentos impresos, pasó a incorporar protocolos técnicos e infraestructura digital como objetos de debate. El conflicto en Ucrania, la difusión de desinformación en elecciones recientes y la rápida evolución de la inteligencia artificial consolidaron este desplazamiento de la agenda internacional.


En este contexto, cuestiones relacionadas con la protección de datos, la regulación de plataformas, la seguridad cibernética y la gobernanza de sistemas de IA comenzaron a influir directamente en la distribución de poder entre los Estados. En consecuencia, la elaboración de normas dejó de verse solo como regulación doméstica y pasó a funcionar como instrumento de proyección internacional.


Delegados durante a Assembleia Geral sobre Defesa, Espaço e Cibersegurança da ESA, setembro de 2025
Delegados durante la Asamblea General de la ESA sobre Defensa, Espacio y Ciberseguridad, septiembre de 2025. (Foto: Agencia Espacial Europea)

Competencia entre modelos de gobernanza digital


La Unión Europea consolidó su posición como referencia regulatoria. La Ley de Servicios Digitales (Digital Services Act) y la Ley de Inteligencia Artificial (AI Act), en vigor desde 2024, ejemplifican la transformación de legislaciones domésticas en estándares internacionales. Además de moldear el funcionamiento de plataformas dentro del bloque, estos instrumentos han sido incorporados por empresas globales que buscan mantener acceso al mercado europeo. Esta capacidad demuestra cómo la regulación se convirtió en un mecanismo de poder normativo, proyectando la influencia de la Unión Europea más allá de sus fronteras.


De manera distinta, Estados Unidos sostiene su posición mediante la centralidad de las grandes empresas tecnológicas, que controlan sectores estratégicos como semiconductores, servicios en la nube y redes sociales. La dominancia en estas cadenas críticas proporciona al país instrumentos para condicionar los flujos globales de información e innovación. Este poder estructural ha sido utilizado de forma explícita en disputas económicas y políticas, reforzando la interdependencia como recurso estratégico.


Por su parte, China y Rusia promueven un modelo de soberanía digital basado en el control estatal sobre los datos y en la creación de infraestructuras propias. Además de la regulación doméstica, estos países exportan equipos y soluciones a socios interesados en reducir dependencias externas. Esta estrategia fortalece su esfera de influencia, especialmente en los países en desarrollo, donde la demanda de alternativas de conectividad y servicios digitales ha crecido.


En conjunto, la competencia entre el modelo regulatorio europeo, el liberal norteamericano y el soberanista asiático define las bases del orden digital emergente. La competencia involucra legitimidad, capacidad de adhesión de terceros e interoperabilidad de sistemas, con un impacto directo sobre la gobernanza internacional del entorno digital.


El lugar del Sur Global


El G20 realizado en Nueva Delhi en 2023 destacó la importancia de la infraestructura pública digital, reconociendo su potencial para ampliar la inclusión y reducir los costos de transacción. En este escenario, India aprobó la Ley de Protección de Datos Personales en 2023, fortaleciendo la regulación doméstica y proyectando credibilidad en foros internacionales.


Brasil, aunque innovó con el Marco Civil de Internet y consolidó un marco robusto con la Ley General de Protección de Datos, aún carece de una diplomacia digital articulada. La ausencia de coordinación entre ministerios, agencias reguladoras y sociedad civil dificulta transformar este patrimonio normativo en influencia efectiva en instancias multilaterales.


Sudáfrica concentra sus esfuerzos en coaliciones regionales y multilaterales, pero sus iniciativas permanecen limitadas por la falta de recursos y la reducida escala tecnológica. Así, la posición del sur global sigue marcada por la dependencia: en gran parte de las veces, estos países se adaptan a normas producidas por la Unión Europea, Estados Unidos o China.


Diplomacia digital como instrumento de poder


La diplomacia digital no se limita a la comunicación en redes sociales. Se trata de la capacidad de proponer normas, negociar compromisos y legitimar estándares que estructuran la vida digital global. En este sentido, decisiones aparentemente técnicas sobre protocolos de enrutamiento, criptografía o identidad digital poseen implicaciones políticas directas. Además, la aprobación en 2024 de resoluciones de la Asamblea General de la ONU sobre inteligencia artificial segura y confiable demuestra que ya existen puntos mínimos de convergencia a nivel multilateral, como transparencia, seguridad y respeto a los derechos humanos.


La interdependencia tecnológica, por lo tanto, redefine la propia naturaleza del poder internacional. Estos principios aún deben transformarse en normas vinculantes. La Unión Europea, Estados Unidos y China avanzan en este campo, mientras los países del sur global enfrentan el dilema entre adaptarse a reglas externas o construir capacidad para proponer normas propias. La interdependencia tecnológica redefine, así, la propia naturaleza del poder internacional.


Referencias


BRADFORD, A. (2023). Digital Empires: The Global Battle to Regulate Technology. Oxford University Press.


FARRELL, H., & NEWMAN, A. (2023). Underground Empire: How America Weaponized the World Economy. Macmillan.


G20 NEW DELHI LEADERS’ DECLARATION (2023). Disponível em: https://www.g20.org


GOVERNMENT OF INDIA. Digital Personal Data Protection Act (2023).

Brasil. Lei nº 13.709/2018 – Lei Geral de Proteção de Dados Pessoais (LGPD).


DENARDIS, L. (2020). The Internet in Everything: Freedom and Security in a World with No Off Switch. Yale University Press.


UNITED NATIONS GENERAL ASSEMBLY. Resolution A/RES/78/265: Promoting Safe, Secure and Trustworthy AI (2024).

Comentarios


RI Talks Todos los derechos reservados ©

  • Instagram
  • Youtube
  • LinkedIn
logo
bottom of page